América Latina, la región con el mayor porcentaje de emprendimiento femenino del mundo, concentra también el mayor número de emprendedoras de entre 45 y 64 años
Tres de cada cuatro mujeres de más de 60 años atendidas por la FMBBVA tienen personas dependientes en el hogar
Una de cada nueve personas en el mundo tiene 60 años o más y se espera que siga en aumento, según Naciones Unidas
Cuando muchas mujeres empiezan a pensar en la jubilación, otras no pueden permitírselo. Según el Global Entrepreneurship Monitor (GEM), el emprendimiento se convierte en algo necesario para subsistir entre las personas mayores de 55 años por las pocas oportunidades de trabajo y la falta de pensiones. De las más de un millón de emprendedoras a las que atiende la FMBBVA en América Latina, el 11% tiene más de 60 años.
Estas mujeres vulnerables tienen un gran impacto en su comunidad: el 78% tiene personas dependientes en el hogar y de éstas casi la mitad es la responsable única. Además, en sus negocios venden un 15% más que las emprendedoras más jóvenes.
América Latina es la región con mayor porcentaje de emprendimiento femenino del mundo, y concentra también el mayor número de emprendedoras en segmentos de población de entre 45-64 años (GEM). Y, aunque no existe una brecha de género muy pronunciada ‒por cada diez hombres emprendedores hay ocho emprendedoras‒, ellas son las que montan un negocio por necesidad, no por oportunidad. Una de las razones para emprender, especialmente a causa de la discriminación negativa hacia la mujer en la edad de jubilación, es la falta de ahorro. Por un lado, cuentan con menos años de cotización y por otro, dicha cotización es en base a una renta femenina inferior (la renta media de las clientas de la FMBBVA es un 25% inferior a la de los hombres).
Según Naciones Unidas, 901 millones de personas tienen 60 años o más (12% de la población global). Este segmento crece un 3,26% por año y se estima que llegue a las 2.100 millones de personas en 2050. Un aumento que debería acompañarse de iniciativas para que la edad no sea una desventaja a la hora de pedir un crédito. Además, según el GEM, en América Latina las mujeres que emprenden tienen que hacer frente a más dificultades que los hombres: tienen más responsabilidades domésticas, menos niveles de educación, falta de capital y activos, un estatus social más bajo y una falta de confianza impuesta por la sociedad.
En la región, el emprendimiento de las mujeres representa 86.000 millones de dólares, según ONU Mujeres. Luiza Carvalho, directora de este organismo para América Latina y el Caribe, afirma que, a nivel mundial, éstas son unas oportunidades de negocio “de hasta 800.000 millones de dólares anuales”. Empoderar a las mujeres y potenciar una participación más equitativa en la economía son claves para alcanzar la igualdad de género. Y, en palabras de Phumzile Mlambo-Ngcuka, directora ejecutiva de ONU Mujeres, la lucha para lograrlo “tiene que tener fecha de caducidad”. Por eso, la Fundación Microfinanzas BBVA trabaja para acercar oportunidades a todas las mujeres vulnerables que, mayores o no, deciden emprender para que sus familias tengan un futuro mejor.
Proporción de emprendedoras mayores de 60 años y edad legal de jubilación
Fuente: Entidades del Grupo FMBBVA y fichero de trabajo del informe Women, Business and the Law 2016 de World Bank Group. Elaboración MIDE-FMBBVA