Celia Cañas de 41 años nació en Cartagena, pero actualmente reside en el municipio de Santander de Quilichao y es madre de 2 hijos; por esto, en plena pandemia y debido a la crisis económica de ese momento decide emprender.
Ella es Contadora Pública y tiene experiencia dictando clases y dando asesorías sobre temas financieros y contables, al ver que en ese momento no podía trabajar, decidió dictar capacitaciones y clases de forma virtual lo que le permitió también, estar pendiente de sus hijos, de su mamá que sufría una grave enfermedad y además aportar económicamente a su hogar.
Con su emprendimiento ‘La profe CC’ logró aprovechar la necesidad que tenían en ese momento los niños para desarrollar sus clases, creó un taller en el que ayudaba a niños con sus tareas y con el tiempo su emprendimiento fue avanzando cada día más. Cuando las clases presenciales regresaron Celia empezó a buscar entidades para brindar asesorías contables, quería dedicarse en algún campo relacionado con su profesión es así como inicia con su primera asesoría con un acueducto comunitario y con el Centro Cultural de Memoria del municipio de Santander de Quilichao.
En el 2021 por una publicación en las redes sociales, conoció al Programa EMPROPAZ y se inscribió en este. Como parte del proceso de aprendizaje de Celia, empezó a brindarle asesorías virtuales a sus compañeros dentro del programa, con esta experiencia logró mejorar sus habilidades, aprender a manejar algunas herramientas virtuales y conociéndose a sí misma para transmitir sus conocimientos, sabiendo que la contabilidad es un tema que no todo el mundo domina fácilmente.
Gracias a EMPROPAZ resalta que en su proceso pudo adquirir nuevas capacidades y nuevas formas y herramientas tecnológicas, que le sirvieron de gran ayuda para crecer con su emprendimiento, con estas nuevas habilidades pudo llegar a las redes sociales, en donde brinda asesorías en vivo a sus clientes.
Es así como Celia, ‘La Profe CC” logró graduarse del programa EMPROPAZ, culminando todos los procesos, talleres y capacitaciones con éxito, en mayo pasado y para ella fue una experiencia inolvidable, el haber compartido con sus otros compañeros y sentir el orgullo de ese reconocimiento por haber tenido la valentía de emprender fue una sensación maravillosa: “A todos los seres humanos nos gusta ser reconocidos, reconocer la valentía de haber emprendido y además ser la maestra de ceremonia, me llenó mucho”. Actualmente, Celia continúa haciendo asesorías y capacitaciones, también se postula constantemente para tener contratos con el Estado, incluso ya lleva más de un año asesorando a un empresario de EMPROPAZ y a varios de sus compañeros: “Lo más importante para mí es siempre trabajar cerca de mis hijos y para este año también quisiera abrir mi propia oficina y culminar mi maestría”.