Todos aquellos que se lanzan al mundo del emprendimiento deben ser constantes para mantener sus unidades productivas en funcionamiento. Comenzar puede que no sea la tarea más sencilla, pero cuando se van alcanzando objetivos se logran grandes satisfacciones.
Los colombianos siguen poniendo en marcha sus ideas de negocio, por ejemplo, según el último reporte de Confecámaras, entre enero y septiembre de 2021 nacieron 251.008 nuevas empresas, lo que equivale a un 16% más que en el mismo periodo de 2020.
Lo importante es que los emprendedores sigan buenas prácticas que les permita mantenerse en el tiempo y que sus negocios puedan ser sostenibles financieramente. Seguir algunas pautas, durante las diferentes etapas, podrá facilitar el proceso de emprender, así que toma atenta nota a los consejos que te compartimos a continuación:
- Tener una idea clara: toda empresa u organización nace de una propuesta que se tiene en la cabeza, pero debe ser clara y muy enfocada a lo que se desea hacer para estructurar el negocio de forma adecuada. Por ejemplo, saber cuáles son los productos o servicios que se van a vender para no improvisar. En otras palabras, evitar el “probar” con muchos productos para “ver” a cuál le va mejor y así inclinarse por uno en específico. Desde el comienzo eso debe estar claro.
- Calcular la inversión: uno de los retos más grandes es generar un presupuesto para saber cuánto será el monto de inversión desde el inicio. Acá se debe hacer un análisis de cuánto se va a requerir para tener los insumos necesarios para poner a “rodar” el emprendimiento. En otras palabras, qué tanto dinero se necesita para materias primas o arriendo de un local si es el caso, entre otros, de esa manera no se generarán deudas que no se pueden cubrir en las primeras etapas.
- Crecimiento sostenible: para lograr que cualquier unidad productiva empiece a tener un crecimiento sostenible es necesario que se genere una estrategia de reinversión. Hay que destinar un porcentaje de las ganancias para ahorro con el fin de comprar elementos necesarios. Si se tiene un taller de costura, poder planificar la compra de más máquinas de coser o unas más modernas, eso contribuirá a hacer más competitivo el negocio.
- Expansión: cuando las cosas van marchando como se planifican, es mejor no quedarse en una situación de tranquilidad, hay que seguir buscando retos y una alternativa es expandirse, llegando a más mercados o abriendo otra sede en la ciudad o municipio. Aunque será un gran desafío, se empezará a fortalecer el negocio y se descubren otros horizontes para ir más allá de lo soñado.
- Consolidación: hay tener la voluntad y hacer el esfuerzo de mejorar las estructuras existentes dentro del emprendimiento. Acá se pueden aplicar herramientas para mejorar el enfoque estratégico de las empresas, analizando las debilidades que se han tenido durante las fases iniciales y también reconociendo las fortalezas, de esa forma se puede ver más claro la manera de enfocarse en innovar en los productos y brindar un servicio diferencial para fidelizar a los clientes.