En lengua katía, Urabá significa ‘La tierra prometida’, precisamente en esa región se ubica Apartadó; el municipio más poblado de la zona y -por ende- el que tiene una gran importancia comercial y económica. La cabecera municipal está a 310 kilómetros de Medellín y es uno de los municipios que pertenecen al eje bananero.
Para el triángulo bananero compuesto por Apartadó, Carepa, Turbo, ese producto significa el 85% del total de la economía. Por eso es importante entender todas las posibilidades que de allí se desprenden para los agricultores de llegar a contar con el apoyo para recibir formación, obtener conocimientos, recibir recursos financieros y llegar a ser más productivos para aumentar la calidad del producto.
En 2020 el banano ocupó el quinto lugar como el producto no minero-energético más comercializado a nivel global, alcanzando negocios por US$905 millones en ventas. De igual manera, según La Asociación de Bananeros de Colombia (Augura), alrededor de la producción de esta fruta se genera empleo 100% formal en la región.
De acuerdo con datos del Dane, de los tres municipios más productores, Apartadó, con cifras a 2019, obtuvo el PIB más alto con $2,4 billones; le siguió Turbo, con $2,3 billones; y Carepa, con $1,16 billones.
Después de esta importante industria, Apartadó tiene opciones en los cultivos de plátano, cacao, maíz, yuca, arroz, ñame, frutales y algo en la ganadería. En el comercio se destacan el sector bancario, centros comerciales y un poco de infraestructura hotelera. Es el municipio de la región que más alberga empresas del sector comercio y de servicios.
Apartadó ha sido un territorio que ha vivido de cerca la violencia y la guerra del país, pero esto no ha sido impedimento para que sus habitantes demuestren una actitud pujante para trabajar, formar microempresas y emprender.
Teniendo en cuenta la templanza e iniciativa de sus habitantes, Empropaz ofrece formación especializada a sus emprendedores y microempresarios, como lo ha hecho en diferentes zonas rurales de Colombia, especialmente aquellas afectadas por la violencia y la pobreza.
Con la generación de conocimientos en diferentes áreas, seguramente podrán tener oportunidades para fortalecer sus negocios, impactando la economía de la región y transformando la vida de sus comunidades y familias, todo se complementa con los servicios financieros que ofrece Bancamía, entidad líder del proyecto, permitiendo la inclusión financiera de los pobladores.
Bajo el programa, fue gratificante que la entidad financiera beneficiara a un total de 333 personas, donde 275 microempresarios recibieron acceso a servicios financieros y otro grupo estuvo compuesto por 58 emprendedores lo que demuestra el dinamismo de la región y las ganas de su gente por crear negocios productivos y fortalecer su tejido económico. De igual manera, es de destacar que de quienes accedieron a los servicios, el 79% son mujeres.
Una de las opciones de ingresos que han encontrado en el municipio es aprovechar su fortaleza bananera para asociarla al turismo, por ejemplo, agendando visitas a las fincas bananeras y que los viajeros conozcan todo el proceso de producción y embarque de la fruta, asimismo, conocer y visitar a las poblaciones indígenas, en su mayoría de las etnias Cuná y Emberá Katío, para que los turistas aprovechen y compren los diferentes productos realizados en sus resguardos.

Cultural, turística, empresarial y musical, todo forma la esencia de Cali
Una de las ciudades más importantes del país se destaca por las grandes oportunidades que existen para los emprendedores y microempresarios de la regios en los diversos sectores económicos.