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Granja Maleja, el sueño de convertirse en un emprendimiento de alcance nacional

En Villagarzón (Putumayo), se ubica el emprendimiento Granja Maleja; un galpón de gallinas criollas ponedoras que fue fundado hace un año. Detrás de esta iniciativa está Ruth Andrea Estrada Perafán, una pastusa de 42 años que sueña con poder comercializar huevos en toda Colombia. Esta es su historia.
 
Creció en Pasto y allí se graduó de bachiller. Luego, se propuso ser Auxiliar de Enfermería, así que, para costear sus estudios, Ruth trabajó como administradora y vendedora en un centro veterinario, oficio que ejerció mientras realizaba su carrera. Al ser una joven aplicada consiguió el objetivo y se graduó.
 
Al tener su título decidió mudarse al Alto Putumayo y se radicó en el Valle de Sibundoy, donde vivía gran parte de su familia materna. Ya ubicada, ejerció su profesión en un hospital durante nueve años. Por cuestiones económicas, decidió apartarse del cargo y comenzó labores en el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar con los programas de Modernidad Familiar en el área de nutrición y allí permaneció por seis años.
 
Para ese momento de su vida, Ruth Andrea estaba casada. Su esposo recibió una oportunidad laboral en Villagarzón, por lo que la pareja emprendió un nuevo camino. Al llegar al municipio, no encontró trabajo y así pasó el primer año, pero apareció una alternativa para regresar a laborar que le cambiaría la vida: ser secretaria de proyectos de las Hermanas de la Caridad de Santa Ana.
 
“Las Hermanas de la Caridad tienen la fundación Juan Bonal, ellos son gestores de diferentes proyectos con mujeres vulnerables, cabeza de familia o desplazadas; entonces yo ingresé a hacer seguimiento a 21 microempresas familiares que están radicadas en Villagarzón y -de esa forma- empecé a participar en esta clase de iniciativas”, contó Ruth.  
 
El nacimiento de Granja Maleja
 
Las microempresas que hacen parte de la fundación están bajo un seguimiento para su consolidación, por ello realizan un aporte solidario de 5% y ese fondo se utiliza para crear otras nuevas empresas o solventar situaciones de contingencia de las que ya están vinculadas y bajo seguimiento. Cuando hubo dinero suficiente, la decisión fue apoyar el nacimiento de un nuevo emprendimiento, entonces Ruth vio una oportunidad y se presentó con la idea de crear Granja Maleja, afortunadamente para ella recibió el apoyo solicitado.
 
Así que Ruth enfocó sus esfuerzos en el montaje de la infraestructura para el galpón, luego, consiguió las gallinas ponedoras y, además, adquirió los insumos para su alimentación y cuidado. Al tener todo listo, se concentró en la comercialización de sus productos.
 
 “Yo estaba iniciando en el mundo del emprendimiento, pero necesitaba tener más conocimientos. Entonces, alguien me habló de Empropaz y la formación gratuita y especializada que brindaba en la zona. Los busqué y me presenté, me aceptaron en el programa y -actualmente- estoy formándome, pero he podido aplicar muchas cosas que me han enseñado para fortalecer mi unidad productiva”, expresó la emprendedora.  
 
Para ella, Empropaz le ha permitido adquirir herramientas de manejo de negocios, pero algo que considera vital es que en el trabajo de empoderamiento “nos hacen entender que es un trabajo familiar, ya que mi esposo y mis hijos me ayudan, entonces ese empoderamiento debe ser grupal, no solo mío, debo tener esa visión. También agradezco que me explicaran que debo estar revisando siempre que tan rentable está siendo el emprendimiento; analizando qué impacta el negocio y los factores externos que afectan el mercado, las diferentes variables que pueden presentarse como la pandemia, uno nunca pensaba en eso”.
 
Para cerrar, Ruth Andrea señaló que el galpón ha tenido una buena acogida, ya que en los dos ciclos que tienen las gallinas: el primero poniendo los huevos y en el segundo cuando se comercializan como tal los animales, Granja Maleja está siendo reconocida. “Estamos en la búsqueda de recursos para comprar un carro y llegar a más municipios, pero, además, la visión es comercializar huevos en toda Colombia, porque son de alta calidad y sé que con trabajo duro puedo lograrlo, no hay nada imposible”.

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