La población rural en Colombia ha cambiado drásticamente desde mitad de siglo hasta la fecha. A pesar de las características geográficas del país y su amplio potencial agropecuario, en solo medio siglo la balanza de habitantes del campo se ha invertido a tal punto que, de un 67,3 % de colombianos que vivían en zonas rurales en los años 50’s se pasó a tan solo un 15,2 %, según cifras del último censo realizado por el DANE (2018).
Esto, no solo como consecuencia de la industrialización y la creciente demanda de labores en zonas urbanas. El abandono de las áreas rurales también se vio impulsado por factores como la presencia de grupos armados, el narcotráfico y el desplazamiento forzado, los cuales azotaron estos territorios por años.
Pero más allá de las dificultades presentadas para vivir en el campo colombiano, existen otras causas de la disminución en el nivel de colombianos dedicados a la labor agrícola. La baja tecnificación en cuanto a explotación agropecuaria, la poca cantidad y mala calidad de vías que encarecen la distribución de los productos, junto a las nuevas reglamentaciones de producción y los altos costos de materias primas han hecho parte de esta problemática.
A pesar de esto, la importancia del sector rural en el desarrollo nacional sigue siendo enorme, pues bien, en 2019 la producción agrícola se posicionó como la cuarta actividad productiva más dinámica de Colombia, con un aumento del 2 % en el PIB frente al resultado del cierre del año inmediatamente anterior.
Por todo lo anterior es que nace este programa, Emprendimientos Productivos para la Paz EMPROPAZ, el cual es desarrollado por Bancamía, en alianza con la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), La Corporación Mundial de la Mujer Colombia y La Corporación Mundial de la Mujer Medellín, para hacer frente a las problemáticas estructurales que atraviesa el sector rural y sus habitantes, apalancando el desarrollo social, económico y ambiental de 58 municipios del territorio nacional, por medio de un modelo de inclusión financiera integral, innovador y autosostenible.
A la fecha hemos hecho grandes avances, entre los cuales se destaca la participación de 10.661 personas en Empropaz, tan solo en el primer trimestre del año en curso, sumando con esta cifra un gran total de 38.977 usuarios atendidos desde la creación del programa.
En términos de inclusión y/o población vulnerable, es de destacar que de los 470 microempresarios con negocios en curso que reciben el apoyo de Empropaz, un 63 % son mujeres, el 30 % viven en zonas rurales y el 50 % cuentan a lo sumo con educación primaria.
Del mismo modo, entre los 437 emprendedores que pondrán en marcha sus ideas con el acompañamiento del programa, 76 % son mujeres, 36 % habitan en un entorno rural y el 28 % únicamente han cursado educación primaria.
Aún contamos con objetivos muy ambiciosos para la transformación estructural del sector rural en el país, entre los que se encuentran apoyar a 110.776 microempresarios rurales, dándoles acceso a créditos productivos; a 14.300 personas con acceso a cuentas de ahorros y a 7.500 personas, facilitándoles la obtención de productos de inversión.
Queda mucho por hacer, pero trabajando juntos construiremos el camino del progreso para miles de colombianos y seguiremos impulsando el desarrollo de la población rural del país. Descubre cómo lo haremos en la sección Conoce Empropaz.